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Boda en Finca Son Mesquida Nou.
Hoy os voy a contar esta preciosa boda en la Finca Son Mesquida Nou de Algaida que hemos vivido. Gracias a este trabajo como fotógrafo de bodas tengo la suerte inmensa de poder conocer a muchas personas. Se cruzan en mi vida en un momento muy especial para ellos ya que están planeando el día de su boda. Todas estas parejas tienen sus historias, sus momentos, sus ilusiones y me encanta cuando me lo cuentan todo.
Esta boda ha sido marcada por cada detalle planeado con mucho gusto y amor. Ellos son Jean Pierre y Manuel dos chicos que estaban destinados a encontrarse y vivir su propia historia de amor. Todo lo organizaron juntos desde Londres que es donde viven. O quizás puedo decir que desde muchos rincones del mundo porque no paran de viajar por trabajo. Son productores de un programa de la televisión inglesa y graban por todo el mundo.
Planeaban hacerlo todo ellos mismos sin wedding planner y querían que cada momento y cada detalle fuera mágico. Esto no es nada fácil pero para ellos es algo a lo que están acostumbrados. Su historia de amor ha estado llena de obstáculos, momentos de separación y dudas.
Se conocieron hace mucho tiempo pero de ahí no pasó. Después de que la vida les haya hecho conocer más gente y muchos sitios les volvió a unir. Son una pareja que tenía destinada estar juntos y darse cuenta de que son el uno para el otro.
Cuando los conocí inmediatamente comprendí lo mucho que se quieren y me encantaron. Me contaron la historia de la pedida de mano que me parece espectacular. Jean Pierre organizó que muchos amigos de ambos se aprendieran una coreografía . Un día llevó a Manuel al parque de El Retiro en Madrid y sin que él se imaginara nada todo empezó.
Sonó la música de La La Land y empezaron a salir amigos bailando y cantando en un Flash Mob impresionante. Luego Jean Pierre le propuso a Manuel y por supuesto todo emocionado le dijo que si. Así es esta pareja tan especial de esta boda en Finca Son Mesquida Nou. Me encanta hacer bodas LGTBI con todas estas historias increíbles detrás.
Desde que contactaron conmigo hemos tenido una conexión increíble. Primero fue en una video llamada, ellos en Londres y nosotras en Mallorca. Lo que empezó como una simple conversación se convirtió en tres horas de contarnos toda nuestra vida. Nos faltó abrir un vino y preparar una tabla de quesos online, fue maravilloso.
Son tan abiertos, honestos, divertidos que da gusto hablar con ellos de todo. Este tipo de personas que encuentras y quieres que se queden en tu vida para siempre. Pues así empezó nuestra relación.
Desde entonces hemos estado en contacto continuo. Nos iban diciendo las cosas que querían hacer y que tenían planeadas. Todo el mimo con el que estaban diseñando sus trajes con un sastre de Mallorca y telas compradas en Londres. La música que querían para animar la boda. Yo les recomendé a Rogerio mi gran amigo brasileño. Toca percusión y es capaz de animar todo y organizar una fiesta haciendo sonar dos tenedores.
Esta boda en Finca Son Mesquida Nou prometía muchísimo. Quedamos varias veces, una en Málaga donde estaban rodando y otra más en Mallorca. Poco a poco se iba gestionando todo para esta boda LGTBI, habían contratado a Tot a Punt para el catering y menaje. Les indique lo importante que es una buena iluminación cuando ya anocheciera y todo iba a estar perfecto.
Y llegó el gran día que amaneció con un sol precioso de Agosto y un vientecito que iba a ayudar a llevar el calor mejor.
Llegamos a la Finca y Flora Event ya estaba poniendo toda la decoración. Los de Tot a Punt con Elisabeth al frente tenían ya las mesas casi montadas y todo iba de forma perfecta.
Manuel salió de la habitación y le dimos un beso, estaba con los nervios típicos. Habíamos quedado en que en los preparativos se iban a cambiar el uno al otro. Todavía no se habían visto con el traje hecho a medida por el sastre Manuel Carvajal. Sabían un poco del diseño porque habían escogido las telas juntos, de diseño príncipe de gales a juego los dos. Las telas compradas en Londres la cuna de los sastres para caballeros.
Nos fuimos a uno de los salones donde habíamos acordado hacer las fotos ya que es amplio y tiene luz. Jean Pierre salió y le dimos dos besos estaba también nervioso pendiente de muchas cosas. Los trajes con la ayuda de Manuel Carvajal de Carvajales en Mallorca, su creador, empezaron a salir de sus fundas. Eran espectaculares con detalles preciosos.
Los chalecos tenían una tela preciosa y muy original con motivos de flores por detrás. Ponían el toque desenfadado y moderno. Los zapatos marrones hechos en Londres cada uno con su estilo eran preciosos. El toque más personal estuvo en los gemelos, los de Manu eran de su padre con las iniciales grabadas. Estaban muy elegantes y guapísimos, como dos gentleman enamorados. Se miraban con un amor el uno al otro que emocionaba mucho.
Los invitados ya esperaban fuera, salimos para el welcome drink ya con ganas de que empezara . Todos se sentaron con expectación deseando ver a los novios. Primero hizo su entrada toda la familia cercana a ritmo de la música de La la land, padres, hermanos y sobrinos. Y con Queen a tope sonando, los dos novios del brazo de sus madres respectivamente salieron. Tenían previsto hacer la entrada a la vez por distintos pasillos entre los invitados. Cuando llegaron al altar besaron a sus madres que se sentaron y se quedaron juntos ya por fin delante de todos.
La ceremonia la iba a dirigir una amiga de ellos muy cercana que los conocía muy bien. Hubo dos discursos que nos hicieron casi llorar a todos. Hubo también una escena con velas y las madres con mucho significado. Lo fuerte llegó cuando se leyeron sus votos el uno al otro. Empezó Manuel que enumeró todas las cosas por las que se había enamorado de Jean Pierre. Lo finalizó hablando en francés, Jean Pierre no se lo esperaba para nada y se llevó una gran sorpresa. Los ahí presentes tuvimos que contenernos mientras veíamos a Jean Pierre emocionado y sorprendido.
Cuando llegó el turno a Jean Pierre dijo cosas tan bonitas que ya no nos quedó duda de que eran el uno para el otro. Se complementan de forma perfecta en todos los aspectos. Que se miraran el uno al otro y se dijeran tantas cosas preciosas desde el corazón hizo muy difícil nuestro trabajo. Estábamos todos con la lágrima suelta súper emocionados. Dicen que no son románticones pero saben escribir sentimientos como nadie.
Lo divertido vino cuando se pusieron los anillos porque antes los habían hecho pasar por las manos de todos sus seres queridos. Era una forma de llenarlos de buenas energías y amor. Pues cuando llegaron a ellos se liaron y se pusieron cada uno el del otro lo cual causo muchas risas.
Al terminar salieron debajo de la buganvilla con todos tirándoles pétalos y nos fuimos a hacerles fotos de pareja.
Al ser una boda en Finca Son Mesquida Nou hay muchos sitios preciosos donde hacer fotos. Les bajamos a un campo de trigo donde había una luz brutal. Parecían modelos y que estábamos haciendo una editorial de moda. Fue estupendo que confiasen en mi creatividad y por ello estoy muy agradecida como fotógrafo de bodas en Mallorca.
Volvimos a la zona del cóctel donde todos los felicitaron felices. Había invitados venidos de distintos sitios, de UK, Francia…
Como dije, para animar habían contratado a mi gran amigo y músico Rogerio. Con su grupo de buena música brasileña ponía el ambiente a la boda. El catering de Tot a Punt tenia varias estaciones de comida puestas. Los camareros servían y traían aperitivos deliciosos a todos. Pasamos de ahí a la zona del banquete donde había muchas mesas alargadas y ellos se sentaban en una de ellas.
Las luces de guirnaldas iluminaba todo de forma preciosa y ellos hicieron la entrada con humo de color amarillo. Venían corriendo a tope como si se les fuera la vida en ello muy felices . Terminaron de pie en sus sillas con todo el mundo levantando las servilletas al vuelo. El ambiente y felicidad de esta boda en Finca Son Mesquida Nou estuvo presente todo el tiempo.
Hubo un momento en que una de las amigas de Manuel se levantó y empezó a cantar. Se le unieron todos los amigos en una coreografía que tenían preparada y con patas de cangrejo en las manos. Era una canción de la película La boda de mi mejor amigo, fue genial. “The moment I see you….”
La comida estaba buenísima y todo el mundo muy feliz. Cortaron la tarta de ensaimadas que casi la desmontan y se dispusieron a hacer el primer baile juntos. Era una canción de Vetusta Morla el “23 de Junio” como un vals. Se les juntó Rogerio con percusión y haciendo una conga todos se fueron a la zona de la discoteca. Manuel lo dio todo con un sobrino suyo pequeño, la pareja se lo pasó bomba bailando.
Nos despedimos de ellos dándoles un fuerte abrazo, ha sido un placer hacerles su boda. Una de las más bonitas a nivel emocional y fotográfico, son increíbles y esperamos verles pronto para tomar algo. Les deseamos toda la felicidad del mundo y que se lo pasen súper bien en su luna de miel en Bali.
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1 comment
[…] a ser increíble. Los conocimos a los dos aquí en Palma en un viaje que hicieron para escoger la Finca donde se iban a casar. Aparte, conocer a los proveedores, hacer la prueba del catering […]